sábado, 7 de enero de 2012

Les faux amis

El origen común de dos lenguas como el español y el francés hace que podamos reconocer el significado de muchas palabras gracias a su parecido. Por ejemplo, étudier y estudiar. Sin embargo, muchas veces el parecido de algunas palabras puede llevarnos a una conclusión errónea: déjeuner no es desayunar sino almorzar. Éste es un caso de faux ami.
Ahora bien, podríamos quedarnos con esta simple constatación, o ir un poquito más allá y preguntarnos por qué existe este faux ami. De esta forma aprenderíamos varias cosas: antiguamente, déjeuner significaba justamente desayunar, por lo que hubo un tiempo en el que estas dos palabras no eran des faux amis. En ese entonces, dîner significaba almorzar y souper significaba cenar. En algún momento, debido quizás a ciertos hábitos de Louis XIV, se produjo un desplazamiento en el significado de las palabras: déjeuner significó almorzar, dîner pasó a significar cenar y souper indica el hecho de comer a una hora avanzada de la noche. Este desplazamiento en el significado de las palabras se produjo en Francia, pero no en Canadá o en Bélgica, por ejemplo, donde déjeuner continúa a significar desayunar. ¡Esto quiere decir que déjeuner y desayunar no son des faux amis en Canadá ni en Bélgica!
En Francia, el desplazamiento en el significado de las palabras que hemos descrito implicó la búsqueda de alguna otra manera de referirse al desayuno. ¡Para eso se recurrió a la misma palabra déjeuner! Sólo que para distinguirla del almuerzo se le agrega alguna otra indicación, por ejemplo déjeuner du matin como en la poesía de Jacques Prévert, o más comunmente petit déjeuner.
Curiosamente, en francés, la comida del día y el verbo que indica el hecho de ingerir esa comida tienen la misma forma:
déjeuner (almorzar) --> le déjeuner (el almuerzo)
goûter (merendar) --> le goûter (la merienda)
dîner (cenar) --> le dîner (la cena)
De ahí que, aunque parezca increíble e incluso muchos franceses no lo sepan, existe el verbo creado a partir de:
le petit déjeuner (el desayuno) --> petit déjeuner (¡¡¡desayunar!!!)
Normalmente, los franceses utilizan la expresión prendre le petit déjeuner para decir desayunar.

4 comentarios:

María dijo...

A raíz de este post seguí leyendo y me sorprendió encontrarme con la idea del parentesco entre "déjeuner" y "dîner", manifiesta en la 1ª y 2ª pers. pl. indic. pres. de la conjugación del verbo "desjuner" del antiguo francés, teniendo en cuenta que la "s" (disnons, disnez) pasaría a quedar representada por el circunflejo en "dîner":

(je) desjune
(tu) desjunes
(il/elle) desjune
(nous) disnons
(vous) disnez
(ils/elles) desjunent

mecachendie dijo...

Interesante tu observación, María. El origen de ambos verbos es el mismo. En español, siguiendo un procedimiento habitual, agregando el prefijo des, se forma:
enrollar --> desenrollar
andar --> desandar
ayunar --> desayunar
Es decir que el sentido de desayunar vendría a ser romper el ayuno.
En inglés es literalmente así: de break (romper) y fast (ayuno) se formó breakfast (a partir de to break one's fast).
El francés siguió el mismo camino que el español: de jeuner (ayunar) se formó desjeuner que luego, por la desaparición gráfica de la s que ya no se pronunciaba, dió déjeuner. Digamos para ser más precisos que tanto la forma del español como la del francés derivan de la forma latina disjejunare que por haplología dio disjunare. La forma dîner corresponde a las formas en disn- que no están acentuadas en el Radical. ¡Y ya sabemos gracias al querido y nunca bien ponderado Conjugar en francés que esto sólo se produce en nous y vous!

mecachendie dijo...

Pregunta Guillermo si entre los "faux amis" podemos incluir el verbo "subir". Como con la respuesta a la observación de María, tenemos que decir que el origen de ambos verbos es el mismo: derivan del verbo latino "subire" (de "sub" [debajo] y de ire [ir]: literalmente "ir por debajo")
De ahí la idea de "recorrer yendo hacia arriba". Por ejemplo, "subir al primer piso" significa "alcanzar el primer piso partiendo desde abajo".
Pero el verbo latino "subire" también tenía el sentido de "ir bajo un techo", de donde surge la idea de "entrar (en una casa), penetrar". Para finalmente pasar de significar "penetrar en el espíritu de alguien" a "padecer".
Como vemos, de todos los significados latinos, el español retuvo uno y el francés otro.

Ignacio Aguirre dijo...

Me ha encantado la entrada, muy detallada. Desconocía el dato de la relación con Luis XIV.
Yo soy un apasionado de los falsos amigos aunque domino más los anglo españoles. Entre los que tenemos con el francés siempre me ha llamado mucho la atención la palabra décade, que no es década sino período de 10 días.